
El Buda no era un filosofo ni trataba de crear teorías metafísicas de la realidad.
La Reticencia Metafísica del Buda
El Buda se resistía rigurosamente a todo tipo de puntos de vista erróneos, refiriéndose a ellos como “la espesura, un embrolladero, una jungla” en la que uno puede perderse fácilmente. Él predicaba la Visión Correcta como el primero de los segmentos de su presentación más básica del Sendero: el Noble Sendero Óctuple.
Sin embargo, no enseñaba filosofía, a pesar de lo que Sangharákshita dice de él en su artículo temprano “Filosofía y religión en el budismo original y desarrollado” (“Philosophy and Religión in Original and Developed Buddhism”). Al menos, no enseñaba filosofía especulativa; si se le puede describir como un filósofo en alguna medida, sería como un filósofo empírico. No le interesaba dar una explicación racional, completa de la realidad, ni tampoco buscaba esclarecer cómo y por qué funciona. Consideraba que éstas eran distracciones del verdadero quehacer. A veces hablaba de no tener puntos de vista, en el sentido de no tener una posición losó ca preconcebida de la cual asirse. Él veía las cosas tal y como son directamente, a través de su Sabiduría, y no requería de ninguna postura a partir de la cual evaluarlas. Sin embargo, era un pensador que reflexionaba profundamente sobre su propia experiencia del sufrimiento y nos señaló lo que necesitamos saber para liberarnos de él.
Una ruptura completa con el pensamiento indio antiguo
La manera de pensar del Buda representaba una ruptura completa con respecto a la de sus contemporáneos y la de aquellos que le precedieron en la India. Sus enseñanzas le eran bastante ajenas a la mentalidad india en general y a su manera de expresarse, tanto antes como después de su época. Por supuesto que tenía que abordar algunas de las preocupaciones centrales de ese entonces y debía expresarse utilizando una terminología común. Pero rechazaba las tendencias especulativas y metafísicas de la época. Es famoso el hecho de que el Buda no quiso responder a los cuatro problemas metafísicos que le planteó el caminante Vacchagotta, calificándolos de improductivos para alcanzar la liberación del sufrimiento.
Rechazo a abstracciones
El Buda rechazó escrupulosamente todas las abstracciones metafísicas en su presentación del Dharma. A esto se le conoce como la “reticencia metafísica” del Buda. Cuando se interpreta que está utilizando una abstracción (por ejemplo cuando él habló de lo “no nacido” en el Sutta Ariyapariyesana), es claro que está siendo poético y que no se le debe considerar desde el punto de vista filosófico. Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de la tendencia india hacia la abstracción le imprimiera esta característica a su enseñanza. Las teorías Dhármicas encontradas en los textos del Abhidharma fueron el primer resultado, y posteriormente los pensadores Mahayana fuero